Más de 1440 estudiantes de primaria y secundaria, estudiarán en la moderna infraestructura de la institución educativa Fe y Alegría 23, ubicada en Villa María del Triunfo, construida con una inversión superior a los 93 millones de soles.

El ministro de Educación, Jorge Figueroa Guzmán, resaltó el impacto de esta nueva escuela en la zona sur de Lima y afirmó que “la educación pública merece obras con estos estándares de calidad, que reflejan el compromiso del Ministerio de Educación por brindar condiciones adecuadas a los estudiantes, de manera que los motiven, inspiren y fortalezcan su aprendizaje, especialmente en el aspecto formativo técnico-laboral”.

Este colegio perteneciente al Proyecto Especial de Inversión Pública Escuelas Bicentenario cuenta con aulas de innovación pedagógica equipadas con laptops, laboratorio de ciencia y tecnología, talleres creativos, sala SUM, una losa multiuso techada, biblioteca, mobiliario exterior, entre otros ambientes pedagógicos y administrativos.

Asimismo, destacan los seis talleres de Secundaria para Formación Técnica (SFT), en las especialidades de Electricidad, Computación e Informática, Industrias Alimentarias, Industria del Vestido, así como Ebanistería y Carpintería.

Estos talleres totalmente equipados, con equipos de última generación, han sido diseñados para potenciar el aprendizaje técnico y creativo de los alumnos. De esta manera, los adolescentes podrán prepararse para los desafíos del mundo laboral y desarrollar una visión emprendedora, además, si optan por continuar su formación técnica podrán validar sus cursos para acortar el tiempo de estudios.

La directora de la institución, Anabel Cruz, destacó la alegría de la comunidad por este nuevo comienzo. “Es un sueño compartido que hoy se hace realidad. Nuestros estudiantes tienen ahora oportunidades concretas para aprender y desarrollarse en ambientes seguros y motivadores”, destacó.

Esta transformación se enmarca en el Pacto Social por la Educación, iniciativa que promueve el trabajo articulado entre el Estado, la comunidad y diversos actores sociales, para impulsar una educación más justa, inclusiva y de calidad para todas y todos.